Carta de sal
Estoy esperando una carta llena de tristeza, seguro, porque en lugar de una carta será una lágrima y en el papel las lágrimas y las palabras se confunden.
De nuevo vamos a empezar, ¿hasta cuándo vamos a estar siempre empezando?.
En un rincón
Y emergía de raíz, huyendo a contracorriente. En un rincón esperaba el momento de saltar y darte un susto de muerte, pero eso, ya no se lleva.
El hombre espera
Me faltas tú y me iré a dormir tranquila, reunificada. Con el tú que me falta voy a hacer un barquito de papel que llevaré al mar, para que navegue a sus anchas.