Uno

Los novios

En una urna están guardadas las cenizas de un amor que hubo hace tanto tiempo, que la cerradura se ha soldado y la llave se ha perdido. En su interior reina la oscuridad y carece el aire. La urna se cae al suelo en una ofensa y se abre como una sandía; la ceniza negra se derrama como arena quemada y huye por la ventana que está abierta. Los novios recogen la urna, la ajustan, la limpian, la sitúan y la preparan para guardar las cenizas de su propio amor, si el fuego algún día se extingue.

Una lágrima

Era verano. Era un verano especialmente caluroso, el sudor caía en gruesas gotas por el centro de la espalda, el lenguaje se limitaba a una sonrisa, los dientes eran de color blanco. Una lágrima realmente sobraba, pero ocurrió, indecentemente, que una mujer estaba triste porque el hombre que amaba no le dedicaba palabras bellas y en medio del verano, sus ojos eran una fuente de tristeza inagotable.

Es cosa de dos

En sí mismo el amor no es más que un sentimiento en el que se embarcan dos personas que para mas desconcierto son humanas.

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s